El pasado 3 de diciembre, tuvo lugar, con la presencia del consejero de Agricultura, Isaías Pérez Saldaña, la primera reunión con los ayuntamientos y organizaciones de productores para poner en marcha la Indicación Geográfica Protegida (IGP) para la naranja del Valle del Guadalquivir. La IGP englobará los pueblos citrícolas que se encuentran en la ribera del Guadalquivir, desde Córdoba a Sevilla. Todos estos municipios están situados en la línea ribereña que une Guillena con Almodóvar del Río, destacando los municipios de Palma, Lora o La Algaba, con las máximas producciones.

La zona reúne 12.448 hectáreas de árboles de menos de cinco años, que producen 186.720 toneladas de cítricos anuales, así como 13.552 hectáreas de árboles en plena producción de los que se recolectan 609.840 toneladas. En total, la zona que abarcaría la IGP supone un 31,48 por ciento de la superficie citrícola de Andalucía y un 40 por ciento de su producción. En ella hay más de 50 empresas operadoras.

Pérez Saldaña, asimismo, inauguró las nuevas instalaciones de Guadex, la segunda factoría en importancia de la Vega tras la de Zumos Pascual, que dispone de 22.000 metros cuadrados y se ampliará en el futuro hasta alcanzar los 35.000. El consejero recordó que la Junta apoyó este proyecto aportando 2,5 millones de euros y destacó el cambio experimentado por la Vega en 20 años.

Sobre la IGP, Pérez Saldaña dijo que «la mejor forma de defender nuestros productos es identificarlos y diferenciarlos del resto, y no es extraño que de este municipio emprendedor salga esta iniciativa para concentrar la oferta y conseguir situar sus productos en los mercados internacionales».

El director general de Industria Agroalimentaria, Ricardo Domínguez, aseguró que en algo más de un año podría tramitarse la documentación necesaria, y que «para la campaña de 2009, si todo va bien, la IGP podría quedar lista».

Asimismo, señaló que se está dando «un gran paso para la concentración del sector» y que cuanto más municipios englobe la IGP, mucho mejor. Por su parte, el alcalde palmeño, José Antonio Ruiz Almenara, también incidió en que las iniciativas de la IGP y de la creación de una marca de garantía (que sería el paso previo) son «el primer peldaño para defender nuestra naranja».

Fuente: http://www.abc.es